La fascitis plantar es una condición que puede causar dolor en el talón y el arco del pie. Se produce por una inflamación de la fascia plantar, una banda de tejido que recorre la parte inferior del pie desde el talón hasta los dedos. En este artículo te vamos a hablar de todo lo que debes saber sobre la fascitis plantar, sus causas, síntomas, tratamientos y prevención.

¿Qué es la fascitis plantar?

La fascitis plantar es una afección dolorosa que se produce cuando el tejido conectivo que cubre el arco del pie se inflama. Esta afección puede ser muy dolorosa e incluso incapacitante. A menudo el dolor es más intenso por la mañana, ya que el tejido se ha estirado durante toda la noche.

La fascitis plantar también puede ser causada por un calzado incorrecto o un estilo de vida sedentario. Afortunadamente, existen tratamientos disponibles para aliviar el dolor y la inflamación.

¿Cuáles son las causas de la fascitis plantar?

La fascitis plantar suele ser causada por un exceso de actividad o un calzado inadecuado. Las causas más comunes de la fascitis plantar son:

  • Sobreexigencia: la fascitis plantar puede ser causada por un exceso de actividad o movimiento, especialmente si no se está acostumbrado a hacerlo. Puede estar relacionado con la intensidad y/o duración de la actividad, pero también puede estar provocado por un cambio repentino en la misma. Por ejemplo, si normalmente caminas o corres unos pocos kilómetros a la semana y, de repente, aumentas la cantidad de kilómetros que recorres o el ritmo del paso, es probable que desarrolles fascitis plantar. Otros ejemplos de sobresfuerzo que pueden provocar la afección son el baile, el fútbol y el running.
  • Malos zapatos: el uso de zapatos inadecuados para practicar deporte o para caminar también puede ser una causa de fascitis plantar. Los zapatos que no tienen suficiente amortiguación en la parte delantera del pie pueden provocar dolor en las rodillas, las caderas y la espalda, además de en los pies. También es importante llevar zapatos que se adapten bien al pie, ya que los zapatos demasiado grandes o pequeños pueden irritar el tejido y provocar dolor.
  • Obesidad: tener sobrepeso también puede ser un factor desencadenante de fascitis plantar, ya que el exceso de peso puede sobrecargar los pies y provocar inflamación en los tejidos.
  • Edad: la edad también puede ser un factor desencadenante, ya que con el paso del tiempo los pies pierden elasticidad y se vuelven más propensos a lesiones.

¿Cuáles son los síntomas de la fascitis plantar?

A menudo la fascitis plantar genera dolor que se siente peor por la mañana o después de estar sentado durante largos períodos de tiempo. También puede ser difícil caminar o subir escaleras. Algunos otros síntomas de la fascitis plantar incluyen hinchazón, dolor agudo o punzante en el talón, calambres o espasmos en el pie o el tobillo, sensibilidad al tacto en la planta del pie.

Si tienes cualquiera de estos síntomas, pídenos cita para que podamos valorarte y pautarte un tratamiento..

¿Cómo se puede tratar la fascitis plantar?

La fascitis plantar puede ser muy molesta. Afortunadamente, existen tratamientos disponibles para ayudar a aliviar el dolor y la inflamación. Aquí te explicamos algunos de los tratamientos más comunes para la fascitis plantar.

El primer paso para tratar la fascitis plantar es reducir el dolor y la inflamación. Para esto se puede utilizar hielo o bolsas de agua fría para aliviar el dolor y reducir la inflamación. También se pueden utilizar analgésicos como ibuprofeno o paracetamol.

Otro tratamiento común para la fascitis plantar es estirar los músculos y ligamentos del pie afectado. Se recomiendan varios estiramientos específicos que se pueden hacer en casa.

También se pueden utilizar dispositivos ortopédicos, como taloneras o plantillas, para aliviar el dolor y proteger el pie durante el día.

En algunos casos, se necesitará un tratamiento más invasivo para tratar la fascitis plantar. Si el dolor no se alivia con el tratamiento en el hogar o si hay signos de inflamación, es posible que se necesite un tratamiento médico que puede incluir inyecciones de corticoides o plasma rico en plaquetas, así como fisioterapia.

Si el dolor persiste, es posible que se necesite cirugía para corregir cualquier problema en los pies.

¿Cuáles son las complicaciones de la fascitis plantar?

Aunque la fascitis plantar es generalmente una condición benigna pueden surgir complicaciones en algunos casos. Estas incluyen:

  • Dolor crónico: el dolor persistente es el principal síntoma de la fascitis plantar. En algunos casos, el dolor puede ser tan intenso que limita las actividades diarias.
  • Inflamación: la zona afectada puede estar hinchada y sensible al tacto.
  • Bursitis: la bursa es una pequeña bolsa de líquido que protege las articulaciones. Si se inflaman, pueden causar dolor y molestias.
  • Tendinitis: la tendinitis es una inflamación del tendón, que es el tejido que conecta el músculo con el hueso. La tendinitis puede ser muy dolorosa e incapacitante.
  • Espolón calcáneo: este problema se produce cuando se forma un bulto óseo en el talón. Puede causar severo dolor y molestias.

¿Puede prevenirse la fascitis plantar?

La fascitis plantar puede ser una condición dolorosa y debilitante, pero afortunadamente, existen tratamientos eficaces disponibles. Aunque no se puede prevenir del todo, existen medidas que pueden reducir el riesgo de desarrollarla.

Si sufres algunos de los síntomas que hemos descrito, pide cita en nuestro centro de rehabilitación y fisioterapia para que podamos valorarte y pautarte un tratamiento. Si tu médico ya te ha diagnosticado una fascitis plantar y necesitas de fisioterapia, igualmente estamos encantados de ayudarte a mejorar esa molestia y que puedas volver a estar en condiciones de correr y saltar.